Mejores monumentos en Copenhague

Christienborg Slot es el hogar del Parlamento, la Corte Suprema y el Departamento del Primer Ministro. El obispo Absalon mandó a construir su castillo aquí mismo en 1167 pero en 1732 el edificio original fue reemplazado por un castillo magnífico de estilo barroco a pedido de Christian VI. Después de sufrir daños mayores a causa de un incendio, Christianborg tuvo que ser reconstruido en dos ocasiones, primero en 1794 y luego en 1880. Un tercer Christianborg fue construido entre 1907 y 1923, este de estilo barroco, siguiendo los planos del arquitecto Thorvald Jørgensen, que es el que se aprecia actualmente. Detrás del palacio encontrarán las caballerizas y unos jardines originales del antiguo castillo barroco del Christian VI. En verano, los campos de cabalgata se utilizan para la organización de obras de teatro y conciertos.

Fundado en 1843, los Jardines Tívoli son un parque de diversiones único ubicado donde solían estar las murallas de la entonces ciudad fortificada. De hecho, el lago dentro del parque es un vestigio del foso original de la ciudad. Mundialmente conocido por su atmósfera de carnaval y sus atracciones emocionantes, los Jardines Tívoli combinan el encanto del viejo mundo con el dinamismo del futuro. El parque ocupa unos impresionantes 80.000 metros cuadrados en el corazón mismo de Copenhague, lo que lo convierte en uno de los parques de diversiones más grandes del país. Los Jardines Tívoli ofrecen unas atracciones increíbles, como una montaña rusa histórica, un barco pirata mítico y varios carruseles. También encontrarán al rededor de 40 bares y restaurantes, algunos de los cuales son gourmet y datan de 1843. El entretenimiento de la más alta calidad está garantizado y las festividades se vuelven más marcadas durante la temporada navideña.

El fastuoso Castillo Rosenborg se puede apreciar desde grandes distancias, al igual que el alcance de la familia real danesa. Construido por el monarca danés Christian IV y característico del estilo renacentista holandés, el castillo exhibe una arquitectura de cuento de hadas en Kongens Have. Originalmente, Rosenborg era una mansión de verano en las afueras de la ciudad y fue utilizado como residencia real a principios del siglo XVIII. El castillo es famoso por sus salas decoradas y su techo de bronce, si bien la atracción principal es el Gran Salón, que se destaca por sus impresionantes techos de estuco, la insignia real, los frescos delicados y los doce tapices que ilustran las victorias del trono durante la Guerra de Escania. El castillo está rodeado de fosos, y a su lado el rosedal decora el paisaje. Rosenborg es el hogar de las joyas de la corona real y también sirve de museo de la familia real.

Rådhuspladsen está en el corazón de Copenhague. Aquí, encontrarás la Alcaldía, y la casa de Politiken, donde las señales neón brindan noticias de todo el mundo a los transeúntes. También el Palace Hotel, los restaurantes al aire libre, los kioskos de periódicos y los famosos plsevogne daneses (puestos de hot-dogs) se encuentran aquí. Rådhuspladsen es un punto de encuentro social importante y un lugar para disfrutar de magníficas vistas de los fuegos artificiales de Tivoli. Rådhuspladsen fue construida originalmente con la forma de una concha; el modelo fue la gran plaza del pueblo italiano de Sienna.

El corazón de Copenhague es el hogar de la impresionante torre circular construida a pedido de Christian IV con el fin de promover los estudios astronómicos en el país. Construida en el siglo XVII, la Torre Circular fue en sus inicios un observatorio que estaba conectado con la Iglesia Trinitatis, y formaba parte del Complejo Trinitatis. Entre lo más destacado del antiguo observatorio se encuentran las escaleras ecuestres de inclinación suave, el corredor helicoidal y la plataforma de observación situada en lo más alto. El monograma del rey Christian IV está exhibido en la fachada de la torre al igual que el enrejado bellísimo diseñado por Kasper Fincke. En el interior de la Rundetaarn, el camino en espiral los llevará hasta la biblioteca, donde en el pasado había una inmensa colección de libros universitarios y que era frecuentada por el escritor literario danés Hans Christian Andersen. Con una arquitectura ingeniosa y un interior muy bien diseñado, no sorprende que la Rundetaarn sea uno de los emblemas más icónicos de Copenhague.

Bakken es uno de los parques de diversiones más populares y más antiguos del mundo entero. Al igual que Tívoli, Bakken se encuentra en una zona muy pintoresca de Dyrehaven. En el pasado, la gente se acercaba a Bakken para beber del manantial Kirsten Piils y ser curados de los males que los aquejaban. El parque cuenta con un teatro a cielo abierto donde los artistas entretienen a la audiencia, pero lo más popular sin dudas es la mascota del parque, el payaso Pierrot, quien realiza varios shows al día en su pequeña casita. Las visitas a Bakken por o general se combinan con largos y maravillosos paseos por Dyrehaven.